Está claro que un cierto nivel de humedad ambiental es necesario y saludable, pero a partir de altos porcentajes es perjudicial para la salud. Pensemos por ejemplo que los ácaros viven preferentemente en ambientes con alto grado de humedad y, como sabéis, los ácaros causan gran cantidad de alergias. Sobra decir que los hongos y mohos crecen en ambientes cuanto más húmedos mejor y que además son el origen de algunas enfermedades respiratorias como el asma, la rinitis, la bronquitis,…
Dicho esto, intentaremos daros unos prácticos consejos para quitar la humedad de casa:
1. Ventila a diario tu hogar.
Es el truco más sencillo, pero también uno de los más necesarios y que, sin embargo, no siempre se realiza, o por lo menos no adecuadamente. Esta acción ayuda a que el exceso de humedad que hay en el interior del hogar se expulse al exterior. Ventila mínimo unos diez minutos a primera hora de la mañana y no te olvides de abrir las ventanas de puntos opuestos para que haya corriente.
2. Tiende la ropa fuera de casa o usa secadora.
¿Sabías que la ropa húmeda puede emitir más de 500 gramos de agua al ambiente cada hora?
Si no tienes un espacio específico en el exterior (o interior) usa una habitación que tenga ventana, déjala algo abierta para favorecer la ventilación natural y luego cierra esa puerta.
Otra buena opción es usar una secadora, de esta forma la ropa se secará en su interior y no pasará la humedad al ambiente. Si tienes una secadora de evacuación revisa bien que el tubo de evacuación vaya directamente a la calle y no se quede en la habitación donde la tengas instalada.
3. En el baño.
¿Sabías que una ducha o un baño puede pasar hasta 2500 gramos a la hora de vapor de agua al ambiente? Por ello te aconsejamos:
- Date una ducha corta o no te duches con agua muy caliente.
- Cierra siempre la puerta del baño mientras te duches y también ciérrala al terminar.
- Si tienes ventana, deja ventilando el baño un rato después de la ducha o baño.
- Usa extractor de aire en el baño. Si no tienes ventana es muy recomendable instalar uno.
4. En la cocina.
- Cocina con las tapas puestas.
- Enciende la campana extractora al cocinar
- Cierra la puerta de la cocina mientras cocines.
5. Elige bien las plantas decorativas.
Algunos tipos de plantas o flores requieren mucho riego contribuyendo a subir la humedad ambiental. Otras, sin embargo, ayudan a regularla: hiedra, helecho, clavel de aire, lirio de paz, palma roja… Infórmate bien antes de decorar tu casa con ellas o si no siempre puedes acudir a las artificiales para el interior de las habitaciones.
6. Revisa y repara posibles fugas o filtraciones de agua.
Tanto si se producen por deterioro de instalaciones de fontanería ya viejas, como por goteos continuos en grifos o por pequeñas filtraciones en los tejados.
7. Mantén una temperatura constante en casa.
En invierno regula la temperatura con un termostato, 19-20º será suficiente, y si puedes evita las estufas de gas, ya que producen bastante humedad.
Y en verano un aparato de aire acondicionado nos vendrá bien para bajar la temperatura del aire y con ello la humedad.
Pese a todos estos consejos, puede ocurrir que ya tengáis un problema de humedades en vuestro hogar y que necesitéis unas manos expertas en tratamientos antihumedad. En ese caso os animamos a contactar con Acuasec. Llama al teléfono gratuito 900 535 625 o si lo prefieres solicita un diagnóstico completo y gratuito pinchando AQUÍ.